viernes, 22 de agosto de 2008

VERDE AMENAZADOR





Está claro que la primera foto no ofrece ninguna duda: una coliflor. De la segunda, si no estamos acostumbrados a ver el monte, puede que nuestro juicio sea el de simple paisaje de verde amenazador. ¿He dicho verde amenazador? Sí, lo has dicho. Ah, ya sé por qué lo dije. Volvamos a la segunda foto: si se la amplía mejor. El lugar corresponde a dos pequeñas aldeas del concejo de Noia: O Pereiro de Arriba y O Pereiro de Abaixo. Y la vegetación más cercana al pueblo, de tono algo más brillante y en forma de triángulo, no es otra cosa que un pequeño reducto de castaños, allí castiñeiros. El resto de vegetación es eucaliptos. Todo conforma una unidad verde, cierto, pero una unidad amenazante, pues a poco que se haya ido por la provincia de La Coruña verá como el eucalipto ha desplazado a toda la vegetación autóctona, sean robles, sean castaños, sean alcornoques. Sí, alcornoques también había en la sierra de Barbanza y así lo atestiguan escasos ejemplares bellísimos. Remedio para volver al origen, a la vegetación autóctona, escaso o nulo. Razón económica.
Cuando hice la foto, desde el paseo marítimo de Noia, hable con una señora de la zona, Teresa Corrales Abeijón. Le comenté mi sentimiento hacia aquellos castaños de enfrente, digamos, mi solidaridad con ese reducto. Ella me habló tendido y corto sobre cuándo vinieron los primeros eucaliptos y y de su rápido crecimiento. Aquello marcó cambio y ahí lo tenemos. Cuando hay incendios, el rápido eucalipto vuelve a tomar posiciones de cabeza inmediatamente. Hermosa bisera la de aquellos dos pueblecitos. Teresa me dijo que aquellos castaños, todos juntos parecían una coliflor. ¡Ya me hubiera gustado ver esa sierra como una coliflor completa si no fuera por el verde amenazador del eucalipto!

Dejo un hermoso tema del grupo argentino Bersuit que espero que nos haga recapacitar sobre todo lo que estamos haciendo a la madre Tierra.Cuidémosnos.