sábado, 24 de octubre de 2009

Te distingo por decirme




Pasa. Puedo decir que entras y te distingo por tu forma de hablar, esa que habla por dentro. Pasa, puedo decir que deambulas por lo caído y te distingo por como te paras. Pasa, mira desde dentro lo de afuera, te distingo tu forma de bascularla, la mirada que me cae, ya ves, yo caída, tu que la caes y la rozas y te la entiendo. Pasa, sube, verás el cielo, éste no tiene derrota, sí mi techo, pasa y sube, te distingo como quien baja a lo más callado. Pasa, te cuento, te distingo por decirme.





Amor, cuando yo pienso
en el mal que me das, terrible y fuerte,
voy corriendo a la muerte,
pensando así acabar mi mal inmenso;
mas, en llegando al paso
que es puerto en este mar de mi tormento,
tanta alegría siento,
que la vida se esfuerza y no le paso.
Así el vivir me mata,
que la muerte me torna a dar la vida.
¡Oh condición no oída,
la que conmigo muerte y vida trata!

Miguel de Cervantes, 'El Quijote', capítulo 68, 2ª Parte.