miércoles, 16 de enero de 2013

Mis canciones más entrañas: EN EL ÚLTIMO TRAGO

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...de deveras.



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2 comentarios:

JosepMª dijo...

Últimamente,
tengo problemas con el router.
Me bloquea la entrada a Internet
en el momento menos pensado.

¡Y cómo se me pasan los días!
Me vengo a comentar el post del lunes/14
y me encuentro miécoles/16.

Me fascinó aquella piedra
(o aquél hueso)
Parece una máscara griega
(¿trágica o cómica?)

Chavela Vargas.
Humana hasta el desgarro.

_Nada me han enseñado los años,
siempre caigo en los mismos errores_

El olvido es una bendición.
Lo jodido es la memoria.

Tempero dijo...

Piedra caliza elegida por ese motivo por ti advertido, Josep: máscara.

A Chavela la vi hace unos 7 años en Madrid: su porte, voz, dulzura y desgarro no se ve han borrado. Su poncho, tampoco.

Para esas dos últimas frases de tu comentario te propongo un reinicio (igual que a tu router, un buen reinicio) con un poema de Benedetti. Benedetti no es un gran poeta, a mi juicio, pero tiene un modo de decir cosquilleante que da gusto leer. No obstante tiene poemas muy buenos; éste sobre la memoria:

ESE GRAN SIMULACRO

Cada vez que nos dan clases de amnesia
como si nunca hubieran existido
los combustibles ojos del alma
o los labios de la pena huérfana
cada vez que nos dan clases de amnesia
y nos conminan a borrar
la ebriedad del sufrimiento
me convenzo de que mi región
no es la farándula de otros

en mi región hay calvarios de ausencia
muñones de porvenir / arrabales de duelo
pero también candores de mosqueta
pianos que arrancan lágrimas
cadáveres que miran aún desde sus huertos
nostalgias inmóviles en un pozo de otoño

sentimientos insoportablemente actuales

que se niegan a morir allá en lo oscuro

el olvido está tan lleno de memoria
que a veces no caben las remembranzas
y hay que tirar rencores por la borda
en el fondo el olvido es un gran simulacro
nadie sabe ni puede / aunque quiera / olvidar
un gran simulacro repleto de fantasmas
esos romeros que peregrinan por el olvido
como si fuese el camino de santiago

el día o la noche en que el olvido estalle

salte en pedazos o crepite /
los recuerdos atroces y los de maravilla
quebrarán los barrotes de fuego
arrastrarán por fin la verdad por el mundo
y esa verdad será que no hay olvido


Abrazos.